Richard Gómez
Con 22 años apenas y una estatura cercana a los dos metros, Michael Pineda se ve impresionante desde la lomita y cuando lanza su recta de 96 MPH lo es más aún. Pineda fue el Pitcher del Año en la organización de los Marineros de Seattle con record de 11-4 y 154 abanicados. Tal actuación le permitió comenzar el 2011 con la posibilidad de ser uno de los abridores del equipo grande. “Bueno estoy tomando las cosas con calma y de verdad estoy contento por esta oportunidad de que me están dando los Marineros”, nos comentó Pineda, luego de su última actuación en el Spring Trainning, en la cual trabajó cinco entradas y no aceptó carreras. Una labor que lo afianzó más como uno de los posibles candidatos a formar parte de la rotación.
--- Mi meta era llegar lo más rápido posible a las Grandes Ligas y ahora se me presentó la oportunidad. Todavía no hay nada seguro, pero gracias a Dios las cosas están saliendo bien.
Poseedor de una recta intimidante, Pineda sabe que con un solo pitcheo no se gana en las Grandes Ligas y por eso le pide muchos consejos a Félix Hernández. Ese día le dijo que su recta de dos costuras, pitcheo recomendado por el criollo, no le estaba funcionando y Félix le dijo que siguiera intentando para dominarlo. “Hablar con Félix es una cosa grande. Es el mejor pitcher de las Grandes Ligas y siempre trato de que me ayude. Él me dice sobre cómo tengo que lanzar y me recomienda algunos pitcheos. Sabes, tener aquí a Félix es lo mejor”. Tanto es la influencia de Félix que Pineda le preguntó cómo debía recibir a los periodistas americanos, ya que él no dominaba el inglés y no quería decir cosa incorrectas. El criollo le recomendó que tuviera un intérprete para esos casos.
Admirador de Pedro
“Pedro Martínez es el mejor pitcher dominicano. Su variedad de lanzamientos y su coraje en la lomita no tiene igual. Cada vez que pasaban a Pedro por televisión, dejaba de hacer cualquier cosa para verlo”, nos comentó Pineda, quien también fue admirador de Curt Schilling. “Tenía una mecánica tremenda”. Recta, slider y cambio son las herramientas con las cuales Pineda aspira permanecer en las Grandes Ligas. “Con solamente recta no vas a ganar, incluso si no tienes un pitcheo diferente que lo puedas poner en la zona, tu recta no sirve porque los bateadores hacen los ajustes. Por ahora mi slider y el cambio están funcionando bien y eso me hace un lanzador mejor”. Pineda tenía una efectividad de 3.89 en los entrenamientos y con la lesión de Nate Robertson, estaba ganando la batalla por encima de Luke French. “No he logrado nada todavía. Las posibilidades dependerán de lo que la gerencia quiera. Yo sigo trabajando fuerte, fortaleciendo mis piernas y aprendiendo cada día más”.
La prensa alrededor de los Marineros ya especula sobre las posibilidades de que Pineda y Félix hagan una combinación letal para los contrarios y aunque habrá que esperar hasta el fin de semana, su nombre pareciera darse por descontado. “Es un muchacho tremendo. Tiene mucho en la bola y nos debe ayudar”, nos dijo Félix.
Pineda todavía no ha debutado en su país, pues no ha recibido permiso. “Es un sueño para mí. Jugar ante mi familia y mis amigos tu sabes, es lo mejor. Espero hacerlo pronto y además me gustaría estar con Dominicana en el próximo clásico”, confesó el derecho, quien junto a Iván Novoa, conforman una nueva generación de lanzadores quisqueyanos.
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